Creado a mediados de los años setenta, su comercialización fue inicialmente un gran éxito gracias a su extraño y provocativo diseño fuera de lo común.
American Motors había ofrecido que el auto contara con un motor Wankel (Rotativo) desarrollado por GM, lo que hacía más especial al concept.
El desarrollo del motor nunca se concretó y AMC tuvo que usar motorizaciones tradicionales, con versiones de seis cilindros en línea de 3.8 y 4.2L y un V8 de 5.0L
Al inicio las ventas prometían, ya que en 1975 se comercializaron 145.528 vehículos, pero con el paso de los años y con la mala reputación del modelo, las ventas cayeron como una piedra al vacío, al grado que en 1980, el último año de comercialización, se vendieron únicamente 1.746 autos, todo un problema para la producción en serie.
Su consumación como vehículo "freak" llegó en 1992 cuando fué protagonista de la película Wayne´s World.